Desnúdame serenamente y acuname en tus garras
tocando pacientemente cada pligue y mis entrañas,
saboreando con tu lengua, cruel veneno de mi cuerpo
que te ofrece el paraíso y te lleva hasta el infierno.
Déjame saber que tu beso sabor a azu
fre quemará
las malas rachas y pintará de rojo fuego la pasión
que se extiende a lo largo de mi pecho que te ama,
para así, morir entre tus brazos ya sin ninguna ilusión.
Que la luna me ilumine ya marchita entre tus piernas
y se lleve entre matices platinados mis más erradas quimeras
pues lo oscuro de tu faz tan puramente siniestra
me insita al desenfrenado deseo de tenerte para siempre.
Me perderé entre las sombras y resurgiré triunfadora
al callar las pasiones que se desetarón en mi mente,
soñando contigo, démoniaca imágen ensodercedora
que me nubla en razón y me vuelve pecadora.
las malas rachas y pintará de rojo fuego la pasión
que se extiende a lo largo de mi pecho que te ama,
para así, morir entre tus brazos ya sin ninguna ilusión.
Que la luna me ilumine ya marchita entre tus piernas
y se lleve entre matices platinados mis más erradas quimeras
pues lo oscuro de tu faz tan puramente siniestra
me insita al desenfrenado deseo de tenerte para siempre.
Me perderé entre las sombras y resurgiré triunfadora
al callar las pasiones que se desetarón en mi mente,
soñando contigo, démoniaca imágen ensodercedora
que me nubla en razón y me vuelve pecadora.