Esta noche es grandiosa,
Vida mía, sabes ¿Por qué?
Me toca condenarte.
Mi conciencia y mi orgullo me hablan,
Me alientan ir a buscarte,
En el día me encuentro ausenté, preparando ¿Cómo castigarte?
Cae la oscuridad, y salgo a encontrarte.
El rencor recorre mis venas,
Mi corazón frío y oxidado comienza a latir,
Mis alas cobran vida,
Una criatura comienza a surgir.
Tu olor siniestro de tranquilidad,
Me hace sentir donde buscar,
Volando rumbo a tu futura perdición,
En mi camino, no puedo dejar de sembrar terror.
Llego a tu cama y te encuentro dormida,
Me pongo a pensar, que es muy pronto quitarte la vida,
En ese momento entro a tus sueños,
Y veo buenos pensamientos, buenos deseos.
De pronto todo tú alrededor cambia,
Lo que te agrada ahora te persigue,
No puedes salir de tus antiguos sueños,
No crees como cambiaron tus sueños a pesadillas.
Sabes que aunque quieras, podrás correr mas no escapar,
Grita, llora, lamenta, pues no estoy aquí para salvarte,
El verte sufrir, temblar, me estimula cada vez mas atormentarte.
Tú forma de actuar, me hace pensar, si lo que quiero es odiarte,
O de lo contrario tenerte piedad y lograr perdonarte,
Una decisión muy confusa, mas no me cuestiones, por que el desquiciarte,
Pues esta es la única forma que puedo demostrar, que aun puedo amarte.
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