Con olor a menta fresca una brisa tenue y delirante
cubre un sentimiento muerto en un crudo y ruin paisaje
una estela cruza el cielo es un alma que acaricia
a la muerte y a su velo en tierras bastas baldías.
Bañando así a la medianoche con
un manto polvoriento
de luces arduas sin clemencia sin rostro esclava del viento
pobre alma que vaga sin recuerdos de cuna
o unas memorias escritas pues yace sin cobija o tumba.
Sucumbe en las fronteras y con mirada angelical
observa desde otra ventana promesas en un disfraz
promesas que como relámpagos seruenan en su travesía
al darse cuenta que la vida
no es más que una cruel mentira.
Pues palabras dulces dichas desde unos barrotes fríos
palabras tiernas dichas del infierno pierden su sentido
ahora duerme el silencio duerme bajo un entierro
ahora duerme su cuerpo en las puertas del destierro
duerme la justicia mientras se oculta por un velo
libertad de velo negro yace junto a un corazón muerto
de luces arduas sin clemencia sin rostro esclava del viento
pobre alma que vaga sin recuerdos de cuna
o unas memorias escritas pues yace sin cobija o tumba.
Sucumbe en las fronteras y con mirada angelical
observa desde otra ventana promesas en un disfraz
promesas que como relámpagos seruenan en su travesía
al darse cuenta que la vida
no es más que una cruel mentira.
Pues palabras dulces dichas desde unos barrotes fríos
palabras tiernas dichas del infierno pierden su sentido
ahora duerme el silencio duerme bajo un entierro
ahora duerme su cuerpo en las puertas del destierro
duerme la justicia mientras se oculta por un velo
libertad de velo negro yace junto a un corazón muerto