La sirena de la luna
se hace en su arena
para florecer entre sus velas
cuando la noche acaricia
el manto de su voz
se vuelven las estrellas
para hacer su canto
en el idioma de su luz
pudo cantar a su canto.
Cuando sus besos se hacen
y se producen
en su resucitada aventura
caminan los besos
en el mar que sale de sus espejos.
En cada orilla de los vientos
vuelve la magia
que se eriza
en cada poro de su piel.
Se llenan las estrellas
de un sorbo
cuando piden el amor
y se mezclan
sus sabores
para nadar entre sus bailes.
Llenan el amor de viento
para que vuele el firmamento
y se haga la magia
así hasta repasar sus lágrimas
por si su encuentro
es luminoso en su verso
ese que une sus huellas
con su vida
porque entre pasión
y acción se construye
la feliz imagen
de sonreírle a los
que piden su rosado reflejo
de llegar a cada horizonte
de ver entre sus pensamientos
que hacen la ley en el nombre
de su mirada
que camina
hasta volver a la primera vez,
que deja sus deseos
en la rima
que escala su luz
entre dos pupilas
que se unen
en forma de corazón
para que lata la luna
para que huela a jazmín
para que se acerquen las frases
y su amor hacia mí.