La música de la banda californiana Red Hot Chili Peppers fue utilizada para torturar a los prisioneros de Guantánamo, según un informe de la Comisión de Inteligencia del Senado de Estados Unidos que pone al descubierto las prácticas de interrogación usadas contra los acusados de terrorismo tras los atentados del 11-S.
Uno de los sospechosos, llamado Zayn al-Abidin Muhammad Husayn Abu Zubaydah, fue confinado a una habitación oscura en la que, entre otras técnicas de tortura, fue obligado a escuchar canciones de RHCP entre mayo y julio de 2002, revela 'Al Jazeera America'.