Y mientras las moscas le rondaban
la cabeza degollada
ella tranquilamente
miraba el destellante cadáver
del muerto repugnante
Ella comenzó a bailar
frente al cuerpo inmóvil
hasta que la policía llegó;
a la cárcel la llevó
Que triste situación
mas acostumbrada estaba
nadie entendía
que él no merecía la vida
Mas ella de nuevo pagaría su estadía
día tras día
viendo al próximo que juzgaría.