En el Libro de los Hechos de los Apóstoles (perteneciente al Nuevo Testamento de la Biblia cristiana), se cuenta que en la fecha de Pentecostés (‘cincuenta días’ después de Resurrección de Cristo) los doce discípulos principales de Jesús experimentaron la llegada del Espíritu Santo (una de las tres personas de la Santísima Trinidad) quien se les apareció en forma de "lenguas de fuego" sobre la cabeza de cada uno, y entonces pudieron hablar en distintos idiomas.
Moraban entonces en Jerusalén judíos, varones piadosos, de todas las naciones bajo el cielo. Y hecho este estruendo, se juntó la multitud; y estaban confusos, porque cada uno les oía hablar en su propia lengua. Y estaban atónitos y maravillados, diciendo: «Mirad, ¿no son galileos todos estos que hablan? ¿Cómo, pues, les oímos nosotros hablar cada uno en nuestra lengua en la que hemos nacido? - Hechos 2:5-8
No se sabe a ciencia cierta cuántos idiomas hablaron estos doce apóstoles, pero la Biblia documenta que los judíos en la diáspora hablaban 17 idiomas diferentes.
¿Cómo debemos entender esto? ¿Cómo debemos entender la xenoglosia, la capacidad de hablar un idioma extranjero que nunca se ha oído antes? La religión, la ciencia, y los escépticos del mundo han tratado de explicar este fenómeno en varias maneras, incluyendo la memoria genética, la telepatía, o la cryptonesia (recordando un idioma extranjero aprendido inconscientemente o durante la niñez). Sin embargo, la xenoglosia ha visto muchas manifestaciones a lo largo de la historia, y ninguna de estas respuestas pueden explicar adecuadamente todos los casos.
Según algunos historiadores, el primer caso documentado de xenoglosia se ve cuando un día Dios decidió "confundir las lenguas" de las personas, cuando construían la Torre de Babel, pues en ese tiempo, según el relato bíblico, todo el mundo hablaba una lengua. Pero para aquellos que no consideran la Biblia una fuente histórica fiable, hay una gran cantidad de ejemplos en otros contextos del mundo antiguo y medieval, así como de nuestra era moderna.
¿Idiomas conocidos u olvidados?
Al ser hipnotizada, una mujer de Pennsylvania, EE.UU. era de algún modo capaz de comunicarse en sueco. Sin embargo, su repentina comprensión de la lengua no vino del estudio. Cuando estaba bajo un profundo estado de trance, ella hablaba usando el más bajo registro de su voz, diciendo ser Jensen Jacoby, una habitante de Suecia, nacida en el siglo 17.
Este caso fue estudiado en profundidad por el fallecido Dr. Ian Stevenson ex jefe del Departamento de Psiquiatría de la Universidad de Virginia y autor de Unlearned language: new studies in Xenoglossy (lenguaje indocto: Nuevos estudios en Xenoglosia). Según el Dr. Stevenson, sin formación previa o exposición a la lengua, esta mujer sólo podía saber sueco si se acordaba de ella desde una existencia previa. La teoría del Dr. Stevenson es apoyada por la capacidad del sujeto para nombrar objetos cotidianos del lugar y la hora en la que Jacoby decía que había vivido.
Esto no es de lejos el único caso de xenoglosia atribuido a encarnaciones anteriores. En 1953, el Profesor P. Pal de la Universidad de Itachuna en East Bengal descubrió a Swarnlata Mishra, una niña hindú de 4 años de edad, que de alguna manera era capaz de bailar y cantar en bengalí, sin haber tenido ningún contacto previo con esa cultura. La joven dijo que ella había sido una vez una mujer bengalí quien fue enseñada como bailar por un amigo cercano.
Swarnlata Mishra
El origen de la Xenoglosia
Mientras que algunos atribuyen los casos de xenoglosia a la cryptonesia (como en el caso de la posibilidad de que la joven Hindu posiblemente tuvo algún olvidado contacto con la cercana cultura bengalí), hay una serie de casos en los que tal explicación es insuficiente.
Uno de los más sorprendentes acontecimientos de estos casos ocurrieron en 1977. Se encontró que el convicto de la penitenciaría estatal de Ohio, Billy Mulligan, tenía dos personalidades adicionales: uno identificado como Abdul, que hablaba perfectamente el árabe; y el otro, llamado Rügen, que se comunicaba en perfecto serbo-croata. Según los médicos de la prisión, Mulligan nunca había salido de los Estados Unidos, en donde nació y creció hasta la edad adulta.
Del mismo modo, el biólogo Lyall Watson describe el caso del Indio Igarot, un niño filipino de 10 años de edad que cuando estaba en trance, se comunicada en la lengua Zulu, que nunca había oído hablar.
Un caso fue provocado por un accidente de auto. Antes de un evento en 2007, el corredor de pista de carreras Checo Matěj Kus apenas podía pronunciar algunas palabras en Inglés. Sin embargo, después de haber sido golpeado hasta quedar inconsciente en un accidente, los paramédicos y otras personas en el lugar del accidente se sorprendieron de que Kus de repente podía hablar un claro y perfecto Inglés con acento británico. Sin embargo, la habilidad no le duró mucho. Kus no conserva ningún recuerdo de su fluido Inglés temporal.
Algunos científicos han propuesto que estos casos pueden deberse a una herencia genética, mientras que otros han sugerido que estos individuos podrían estar telepáticamente conectados a esta lengua a través de hablantes de otros idiomas. Sin embargo, estas teorías no beneficia a la amplia investigación, pruebas, y estudio dado por la teoría del Dr. Stevenson.
En apoyo de esta idea, el psicólogo australiano Peter Ramster, autor de "The Search for Lives Past", descubrió que podía mantener conversaciones fluidas en francés antiguo con su alumna Cynthia Henderson, pero sólo cuando ella estaba bajo hipnosis. Cuando ella se encontraba fuera del estado de trance, poseía sólo un conocimiento rudimentario de la lengua.
En la búsqueda de una explicación con todo incluido para la xenoglosia, varios investigadores han llegado a un acuerdo con la comprensión del Dr. Stevenson que apunta hacia vidas anteriores. De acuerdo con esta teoría, después de un trauma, o en un estado hipnótico, la personalidad de una encarnación anterior llega a la persona y este demuestra el conocimiento que él o ella no pudo haber conocido en esta vida. Otros, como la investigadora Sarah Thompson, sostienen que las pruebas presentadas por el Dr. Stevenson son simplemente demasiado escaso como para hacer tal afirmación.
En el principio, el Dr. Stevenson era también muy escéptico con respecto a los casos de hipnosis regresiva; pero a medida que pasaba el tiempo, se convirtió en uno de los autores más prolíficos sobre el tema. Más tarde, cuando su trabajo progresaba, el Dr. Stevenson volvió su atención a los niños pequeños. Él encontró que eran más capaces de recordar la información de encarnaciones anteriores y no necesitaban hipnotización o un evento traumático para revelar su pasado lejano.
El Dr. Stevenson registraría descripciones de los niños de sus vidas pasadas y las compararía con los registros de las personas fallecidas que habían afirmado ser. Él incluso comparo los detalles de las alteraciones físicas de los fallecidos a la descripción del niño, tales como la ubicación de las cicatrices y marcas de nacimiento. Esta información, combinada con los casos de xenoglosia, proveyeron al Dr. Stevenson con lo que él cree son pruebas de vidas pasadas.
Dioses, demonios y idiomas muertos
Pero incluso las vidas pasadas no pueden dar cuenta de todos los casos de xenoglosia. En varios ejemplos, una persona puede hablar un idioma que es atribuido por algunos como la manipulación de seres de otros planos de existencia para diversos propósitos. Es similar a lo que algunos podrían llamar posesión o, en el caso de una entidad benévola, contacto con una forma superior de existencia.
El resultado puede ser aún más curioso cuando los sujetos se encuentran hablando y escribiendo lo inimaginable — como el idioma de la Atlántida, o incluso el lenguaje Marciano, como en el caso registrado por el investigador T. Flournoy en 1899, cuando un sujeto llamado "Helen" dijo que dominaba, aparte del hindi y el francés, el idioma del planeta rojo.
Además de los casos involucrando lenguas de continentes perdidos o planetas cercanos — que siguen siendo difíciles para autenticar — la xenoglosia también se manifiesta como lenguas perdidos, lenguas muertas, o dialectos raros.
Uno de estos casos involucra a un niño Inglés llamadao Rosemary, que, cuando se encontraba en un estado de trance, se convertía en Telika-Ventiu. En 1931, este individuo, decia ser del 1400 d.C., hablaba y escribía en un antiguo dialecto egipcio que sólo unos pocos especialistas en el mundo podían reconocer o comprender.
Si bien el fenómeno de la xenoglosia es intrigante, tal vez aún más fascinante es la posibilidad de imaginar donde tal capacidad podría originarse. Si las teorías presentadas por el Dr. Stevenson y otros investigadores lo suficientemente valientes como para explorar si los enigmas son correctos, entonces ellos ofrecerían ideas más misteriosas que el fenómeno en sí.
¿Podría la xenoglosia ser el resultado de vidas pasadas, o de seres de otras dimensiones? Y si es así, ¿por qué? ¿Sera que estos seres tienen información vital para compartir con nosotros desde el otro lado, o el fenómeno meramente existe para darnos la clave para una mayor comprensión de nuestro mundo? tal vez cuando crucemos esa delgada linea que separa la vida y la muerte lo descubramos.