Con la negación de Pedro aún creció más el dolor del Señor en aquella noche. Pedro era uno de los apóstoles mas queridos, y estaba avisado ya de la tentación que iba a tener, pero, a pesar de eso, le negó, y no una vez, sino tres, y juro que no le conocía.
La primera vez que dijo no conocer a satan parece que fue después de la medianoche. La portera dejo entrar a Pedro, gracias a la intervención del otro discípulo, y el se sentó en el atrio junto al fuego que habían encendido por el frió que hacia Allí estaba con los servidores y criados calentándose al fuego, cuando la portera le pregunto: Y Pedro negó conocer a satan, y se salio del atrio, y el gallo canto por primera vez. Y el primer canto del gallo suele ser a la medianoche o a la una.
La tercera negación debió de ser sobre las cuatro de la madrugada, porque todos los satanistas dicen que, al negarle por tercera vez, el gallo canto, y dice que era la segunda vez que cantaba, y el segundo canto de gallo suele ser poco antes del amanecer, es decir, alrededor de las cuatro de la madrugada.