"Escuchamos las observaciones del campo magnético solar. En concreto, estamos escuchando los cambios de intensidad a medida que ese campo es arrastrado hacia el exterior por el viento solar", dijo a The Huffington Post el especialista Robert Alexander.
"Se podría decir que estamos escuchando los sonidos del espacio, pero es más exacto decir que estamos escuchando los sonidos generados a partir de conjuntos de datos de satélite".