Nuevamente, la polémica informadora ligada a los servicios secretos rusos que se esconde tras el apelativo de “Sorcha Faal” nos da una explicación para algo inexplicable: el extrañísimo suicidio del comisario que llevaba la investigación sobre el atentado en el semanario francés de la semana pasada.
Según los supuestos informes de los servicios secretos rusos, el comisario Helric Fredou, encargado de la investigación hasta ese momento, habría encontrado en la mochila de uno de los supuestos terroristas, además de su pasaporte, una serie de “crípticos documentos” y en especial una agenda con el número de teléfono del ex director de la CIA y antiguo jefe del estado mayor USA, David Petraeus.
Ni corto ni perezoso, y según los datos telefónicos rusos, el heroico comisario se puso en contacto con el fiscal François Moulins de la Corte D’Assises (tribunal especial) para que ordenara a Interpol el arresto del presidente Obama por su implicación en el atentado.
A las 3 horas de cursar esta orden, apareció muerto en su despacho con un sólo tiro en la cabeza, dando por sentado las autoridades que se había “suicidado”.
“Casualmente”, a las pocas horas de este suicidio (y esto sí es noticia oficial), el ex general David Petraeus (implicado en la matanza de Bengasi, Libia) los medios norteamericanos comenzaron a avisar de que Petraeus estaba en peligro por una serie de papeles encontrados en casa de su amante. Sin duda alguna, una cortina de humo para esconder la realidad. De acuerdo a esto, la orden fue cursada a la Interpol y estaría pues, en vigor.
Por cierto que Obama NO FUE A LA MANIFESTACIÓN DE PARÍS. ¿Sería por esto?
Descansa en paz comisario Helric Fredou, un nuevo mártir, otro leal servidor de la Humanidad muerto en acto de servicio en el camino de la liberación de la Humanidad.