“Ha sido un viaje muy difícil. Desde la adolescencia y la universidad hasta la vida adulta. He perdido a muchos amigos. He tenido que decir adiós a personas que pensé que estarían en mi vida para siempre, personas que en las que pensé que podía confiar con los ojos cerrados.”
“Siempre me digo a mí misma: “¿Son estas personas las que quiero en mi vida? ¿Personas que podrían mentirme, engañarme y hacerme daño? Y de esta manera me recuerdo a mí misma que no perdí nada. Puede que extrañe sus compañías de vez en cuando. Puede que vea algo en la calle que sé que encontrarían increíble y detecte una punzada en mi corazón. Lo admito. Pero ese dolor momentáneo se compensa con el hecho de que, al dejarlos ir, dejé de sentir el sufrimiento que esas personas me provocaban.”
Amas ver el nombre de esta persona aparecer en la pantalla de tu teléfono. Darías lo que fuera a cambio de verlos sonreír de forma genuina. Ansías sentir la forma en la que te mira cuando están solos. Sin embargo, al mirarlos a los ojos, comprendes que no ves la reflexión que esperabas.”
“Hay una desconexión, un sentido de distancia que te indica que él o ella no están contigo y que nunca lo estarán sin importar lo mucho que así lo quieras. Pueden decirte que eres hermosa y quieres creerlo porque las palabras llegan a una parte de ti que siente dolor y placer. Una parte de ti busca este dolor que te entrega esta persona. Es un ciclo retorcido de ir y venir hacia esta persona y no puedes evitar volver por todas las posibilidades que crees que existen.”
“Y por eso no voy a darte una segunda oportunidad. Nunca lo haré.”
“Porque si te doy una segunda oportunidad y la cagas de nuevo, es mi culpa, no la tuya. Y no estoy dispuesta a que eso pase.”
“Si pasas por encima de mí una vez, la culpa es tuya. Pero si lo haces dos veces, la culpa es mía.La primera vez que una persona te apuñala por la espalda, no pudiste verlo venir… pero la segunda vez, no tienes ninguna excusa. Si perdonas a alguien de haberte engañado y haberte hecho sufrir, sólo vas a invitar a esa persona a hacerlo de nuevo.”
“No puedo permitir eso en mi vida. No voy a a perdonarte sólo porque tú no me supiste valorar. Puedo vivir con el dolor que viene con que te mientan o engañen, pero no puedo vivir con esas mismas heridas reabriéndose constantemente porque decidí perdonarte.”
“Porque sé lo que eres capaz de hacer.”
“Has demostrado que eres capaz de hacer cosas realmente terribles a alguien que supuestamente te preocupa. Has demostrado que eres capaz de hacerle daño a la gente más cercana a ti y no voy a estar expuesta a ese tipo de toxicidad.”
“Porque cuando rompes el corazón de alguien, realmente nunca sana.”
“Un corazón roto puede ser reparado, pero ese corazón nunca estará completo, por lo menos no del todo.”
“Esos malos momentos siempre dejarán cicatrices. Si eres una persona que se suma a esas cicatrices… Nunca te voy a dar una oportunidad de hacerlo de nuevo.”
“Porque no tiene sentido perdonar a alguien, cuando realmente no voy a poder olvidar. Como la mayoría de las mujeres, tengo una excelente memoria. Una mujer no olvida las cosas, sobre todo cuando esas cosas implican ser traicionado. Dicen que hay que perdonar y olvidar. A la mierda eso, nunca voy a olvidar lo que me hiciste y, por lo tanto, no voy a perdonarte.”
“No te voy a dar una segunda oportunidad, porque no te la mereces. Porque merezco primeras oportunidades, no segundas. Y sé que hay alguien ahí afuera esperándola. Alguien que sabrá valorarla.”
“Y ese no eres tú.”