A MEDÍANOCHE

Poesía a medianocheRetinta la noche de un sábado sin oficio
donde tú y yo nos esperábamos,
 ya se forzaba la lluvia de media noche
y con todo acudiste a una cita dividida, 

bajaste de ese barco un poco apresurado
y ya intuía que te acompañaba  mi antagonista de varias jornadas,
nadaste  hasta mi castillo,  tras dos  tragedias me confesaste:
 “Le he besado”. Ya mi mente diluía un aporte con dulce
veneno, mientras tu la pintabas de carmesí en el suelo

No sientas culpa, se mata un corazón deshabitado solo una vez,
las demás ya son tumbas.

Y si mi espera con la luna se desnuda,
ven y acércate a esta danza voluptuosa,  
adormécete despacio despacio mientras yo seco tus alas
y decides si te salvas de aquí a dos o tres días

Entradas que pueden interesarte

Sin comentarios