Su imagen es aterradora. Tienen una boca circular llena de dientes puntudos y afilados, pueden medir hasta 38 cm y, para colmo, en Alaska están cayendo del cielo. Se trata de una especie llamada lamprea.
En la última semana, el Departamento de Caza y Pesca de Alaska ha recibido llamadas de los habitantes de Fairbanks sobre terroríficos peces que caen del cielo.
"La tienda local Value Village encontró una lamprea viva en el estacionamiento", informó el organismo. Y sumó que "otro residente llamó y dijo que halló una en su jardín".
Más parecidas a anguilas o serpientes que a una trucha, las lampreas no tienen escamas ni aletas. En vez de mandíbulas, una lamprea adulta tiene una boca en forma de disco llena de dientes pequeños y afilados.
Estos animales abren la boca para atrapar y envolver a los peces, luego utilizan sus dientes para raspar las escamas y se alimentan con sus fluidos y sangre.
Es raro que la lamprea sea encontrada en la tierra. Esta especie nace en agua dulce y luego va al océano. Vuelve a su río de nacimiento para engendrar crías.
Sin embargo, funcionarios de Medio Ambiente creen el misterio de la caída desde el cielo tiene que ver con que las gaviotas están recogiendo estos animales, sólo para dejarlos caer más tarde.