El Estado Islámico ha declarado la guerra a la libertad de expresión y continúa asesinando periodistas que trabajan en las regiones que ocupa.
El grupo radical acabó con la vida de un corresponsal iraquí, esta vez en la ciudad de Mosul ubicada al norte de Irak.
Se trata del ciudadano Yahya al-Khatib, secuestrado por militantes de ISIS cuando se encontraba en su casa en junio del año pasado.
El periodista fue ejecutado tras un juicio donde se le condenó a muerte por supuestamente espiar para los medios de comunicación y las fuerzas militares iraquíes.
El caso pone en evidencia la poca seguridad que tiene en la prensa en Mosul, zona donde se ha ejectuado a más de 40 periodistas desde que el Estado Islámico tomó la zona.
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