Hatim Halawa era considerado el futuro del fútbol sala marroquí, pero se unió el ejército del Estado Islámico. Jugó por la selección nacional de su país.
Un jugador de la selección nacional marroquí de fútbol sala se ha unido al Estado Islámico (EI), según confirmaron este martes fuentes de su familia al sitio web canaltetouan.com.
Hatim Halawa, residente en Tetuán (norte de Marruecos), no padecía necesidades de ningún tipo ni era un ignorante, sino que su carrera profesional lo había llevado a jugar a varios lugares con clubes de Kuwait y Catar y a viajar con la selección nacional en 2012 a Tailandia.
La región de Tetuán es un territorio particularmente fértil para el Estado Islámico, pues de ella ha salido una gran parte de los voluntarios del grupo terrorista asentado en Irak y Siria.
Este martes, el diario “Ajbar al Yawm” recogía los casos de cuatro funcionarios de distintos departamentos del estado en esa región, todos ellos de clase media y sin aparentes problemas económicos, que se han unido a las filas del Daesh en los últimos meses.
Según datos oficiales marroquíes, hay confirmados 1.350 nombres de nacionales que se han incorporado a la yihad, de los que al menos 286 han muerto en combate.