“…La autoespiritualidad a nivel espiritual es lo mismo que la autosexualidad a nivel sexual. Es decir, la meditación (colocarse en postura de meditación para “conectar con la Luz”) es lo mismo que la masturbación. LA MEDITACIÓN ES LA MASTURBACIÓN ESPIRITUAL. Todos descubrimos nuestra propia sexualidad con la masturbación, pero la masturbación no es el sexo, con la masturbación no se engendran nuevas vidas. De la misma manera, la meditación sirve para descubrir tu propia espiritualidad, pero después de eso habrá que fundirse con otras almas en la energía del amor y de ahí, de esa fusión surgirá una nueva vida… ¡tu nueva vida! La meditación es como la primera marcha del coche: sirve solo para arrancar y nada más.
Los autoespirituales son meditadores. Los autoespirituales son “onanistas espirituales”.
(…) A propósito de los “onanistas espirituales”, cada vez que alguien sube con su cuerpo mental al plano mental (superior), a la morada de los homoiluminados, los homoiluminados le dan un baño de Luz. Ese baño no siempre será el mismo (no todas las meditaciones son iguales), a veces habrá más Luz, a veces menos… a veces ni siquiera habrá almas disponibles para “dar el baño de Luz”. Los “baños de Luz” se llevan a cabo igual que se “hace el amor”: el homoiluminado fusiona su cuerpo (causal) con el cuerpo mental visitante, transfiriéndole de esa manera Luz y proporcionándole el placer llamado “amor”. Lo que un “onanista espiritual” meditando hace es subir a la morada de los homoiluminados y ponerse a disposición de los habitantes de ese plano de existencia por si alguien quiere “hacer el amor” con él/ella. Esto es como cuando las prostitutas salen a la calle y se colocan en una esquina a la espera de que venga alguien y les “haga el amor”. En eso consiste la meditación: en colocarse en una esquina del plano mental (superior) para ver si viene alguien a darle “un baño de Luz”. Ninguna “meditación” sería posible sin la participación de los homoiluminados. LA LUZ QUE LLEGA A LOS CUERPOS MENTALES DE LAS PERSONAS ENCARNADAS EN LA TIERRA, SIEMPRE LLEGA A TRAVÉS DE UN HOMOILUMINADO, NO HAY OTRA MANERA. Un cuerpo mental que es de naturaleza negativa no puede quedarse permanentemente en la parte superior del plano mental y tampoco puede actuar en ese plano de existencia. Lo único que puede hacer es recibir la Luz e información (solo los más avanzados reciben informaciones, los demás reciben solo el placer llamado “amor”) en modo pasivo y nada más…”
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