
Soy un extraterrestre de una galaxia lejana, donde podemos adoptar cualquier forma. En este momento me he convertido en un poema.
En la cara oculta
de la luna
de mis apneas
ingravitacionales,
en el océano
más meridional
de mis lágrimas,
en la sangre
de cisne
más grumosa
que fluye
de mi silencio.
En la pupila
reptil
de un cóndor
sin andes,
en el huracán
que hiere
los manglares,
en la pampa
de mis dudas,
girando entre
la duna
del remolino
de mis sueños.
En el Sáhara
de mis versos,
en los lunares
libidinosos
del pensamiento,
entre las llamas
clientes
de mis horas.
En el ecuador
de mis polos,
en el límite
de mis venas;
entre las encías
de tus viñedos,
deshojando
terrateniente
poros y besos.
En la sierra lenta
y agraz
que me recorre
y me esconde,
en la espesura
de la selva
de mis secretos,
...tras el pozo
más contaminado
del espejo...
Habita entre nubes
sembradas de tormenta,
el polvo de mis estrellas
peregrinas,
como un extraterrestre
lejos de su planeta,
la esencia que me conjuga
y me delata,
...mi yo verdadero.