Cómo caíste del cielo, Lucero, hijo del Amanecer
Has sido lanzado a la Tierra, dominador de naciones
Decías en tu corazón: "Escalaré los cielos; elevaré mi
trono por encima de las estrellas de Dios; me sentaré
en el monte de la divina asamblea, en el confín del septentrión
escalaré las cimas de las nubes, SERÉ SEMEJANTE AL ALTÍSIMO...
Y así tenemos la palabra profética más segura, a la cual hacéis bien en prestar atención como a una lámpara que brilla en el lugar oscuro, hasta que el día despunte y el lucero de la mañana aparezca en vuestros corazones.
Todo el ejército de los cielos se consumirá, y los cielos se enrollarán como un pergamino; también todos sus ejércitos se marchitarán como se marchita la hoja de la vid, o como se marchita la de la higuera.
Yo soy la raíz y la descendencia de David, el lucero resplandeciente de la mañana.
Has sido lanzado a la Tierra, dominador de naciones
Decías en tu corazón: "Escalaré los cielos; elevaré mi
trono por encima de las estrellas de Dios; me sentaré
en el monte de la divina asamblea, en el confín del septentrión
escalaré las cimas de las nubes, SERÉ SEMEJANTE AL ALTÍSIMO...
Y así tenemos la palabra profética más segura, a la cual hacéis bien en prestar atención como a una lámpara que brilla en el lugar oscuro, hasta que el día despunte y el lucero de la mañana aparezca en vuestros corazones.
Todo el ejército de los cielos se consumirá, y los cielos se enrollarán como un pergamino; también todos sus ejércitos se marchitarán como se marchita la hoja de la vid, o como se marchita la de la higuera.
Yo soy la raíz y la descendencia de David, el lucero resplandeciente de la mañana.