Donald Trump ha anunciado planes para lanzar una plataforma de redes sociales llamada Truth Social que se lanzará a principios del próximo año.
El expresidente, que fue excluido de Facebook y Twitter a principios de este año, dice que su objetivo es rivalizar con las empresas de tecnología que le han negado el megáfono que fue fundamental para su ascenso.
"Estoy emocionado de comenzar pronto a compartir mis pensamientos sobre Truth Social y luchar contra la gran tecnología", dijo Trump en un comunicado.
Si bien la plataforma se presenta como un servicio de comunicación gratuito y abierto que fomenta la "conversación global honesta", el acuerdo de términos de servicio prohíbe a los usuarios burlarse del sitio. Para acceder a la plataforma, los usuarios se comprometen a no "menospreciar, empañar o dañar, en nuestra opinión, a nosotros y / o al sitio".
Trump anunció la noticia en un comunicado de prensa el miércoles, diciendo que la plataforma estará abierta a "usuarios invitados" para un lanzamiento beta en noviembre, con planes de ponerla a disposición del público en general a principios del próximo año. Truth Social será producto de una nueva empresa llamada Trump Media & Technology Group, que se creó a través de una fusión con Digital World Acquisition Corp. El grupo dijo que busca convertirse en una empresa que cotice en bolsa.
Un enlace al sitio web de Truth Social indica a los usuarios que se registren en una lista de espera o que reserven la aplicación a través de la App Store de Apple. Allí, las capturas de pantalla de la aplicación Truth Social muestran un perfil de usuario que tiene un parecido sorprendente con un perfil de Twitter. El nombre Truth Social fue registrado por Trump Group Corp en julio, según documentos públicos.
Aunque la plataforma aún no está abierta oficialmente a los usuarios, algunos pudieron acceder a la aplicación y crear una cuenta a través de una URL que ahora se ha eliminado. Un reportero del Daily Dot pudo crear una cuenta y un perfil como @DonaldTrump.
En julio, Trump demandó a Facebook, Twitter y Google por presuntamente censurarlo. Hasta ahora, las compañías han mantenido sus prohibiciones y suspensiones sobre el expresidente, aunque Facebook planea revisar su decisión en dos años.
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