La agencia de noticias estatal Sputnik dio a entender que los nuevos drones podrían utilizarse en casos futuros si buques navales británicos o estadounidenses navegan por aguas que Rusia reclama como propias.
Una fuente de la industria de defensa dijo que se había desarrollado una tecnología «para proteger las fronteras marítimas de Rusia de buques intrusos, incluidos los militares».
«El sistema incluirá drones de reconocimiento, así como varios tipos de munición de merodeo».
Se informó de que algunos elementos de la nueva tecnología, incluidos los «lanzadores de drones kamikaze», habían sido aprobados por el Ministerio de Defensa.
«La fuente señaló que el sistema es de bajo coste, ya que la munición de acción moderada , es varias veces más barata que los misiles antibuque», dijo el informe de Sputnik.
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«Al mismo tiempo, el despliegue masivo de drones kamikaze puede dejar fuera de servicio a fragatas o destructores al dañar sus sistemas de vigilancia, control y armamento».
En octubre, se produjo un tenso enfrentamiento cuando Moscú afirmó que el destructor estadounidense Chafee se había acercado a sus aguas territoriales y había «intentado cruzar la frontera estatal» en el Mar de Japón.
En junio, Rusia abrió fuego cuando el destructor de la Royal Navy HMS Defender navegó frente a Crimea en el Mar Negro, en lo que los británicos describieron como un acto deliberado de apoyo a Ucrania.
Una embarcación de la guardia costera del servicio de seguridad FSB disparó en dirección al buque de guerra británico, alegando que éste había navegado en aguas territoriales rusas, lo que Gran Bretaña negó.
Moscú también afirmó haber lanzado bombas desde un avión de guerra Su-24 en un intento de alejar el barco británico de la costa de Crimea.