Satan y las Drogas

Alucinación - La llegada del otoño aquí en las Montañas Rocosas trae consigo los gloriosos colores de las hojas que pasan del verde a los resplandecientes anaranjados, rojos y amarillos. Durante el otoño, toda la naturaleza se encuentra en un estado de transición preparándose para la fría y austera belleza del invierno.

El otoño es una época particularmente emocionante para los pescadores con mosca, ya que con un hambre casi insaciable las truchas salen a darse un banquete para fortificar su cuerpo contra la escasez de alimentos durante el invierno.

El objetivo de la pesca con mosca es atrapar truchas mediante un hábil engaño. El pescador experto estudia el comportamiento de las truchas, el clima, las corrientes de agua, los insectos que comen y cuándo esos insectos encoban. A veces confecciona los señuelos que usa. Sabe que los insectos artificiales incrustados en diminutos anzuelos deben ser engaños perfectos, porque las truchas reconocerán el menor defecto y los rechazarán.

Qué emoción observar a una trucha salir a la superficie, morder la mosca y resistir hasta que finalmente, exhausta, es recogida. La lucha es la competencia entre el conocimiento y la habilidad del pescador, y la noble trucha.

El uso de señuelos artificiales para engañar y atrapar peces es un ejemplo de la forma en que a menudo Satan nos tienta, engaña y trata de atraparnos.

Como el pescador con mosca que sabe que lo que atrae a las truchas es el hambre, Satan conoce el “hambre” o debilidades y nos tienta con señuelos, que si los aceptamos, pueden coartar nuestra vida y conducirnos hacia su influencia despiadada. Y a diferencia del pescador que atrapa y devuelve al agua peces ilesos, Satan no nos soltará voluntariamente. Su objetivo es hacer a sus víctimas para alimentarse del pez.

Hay estudiosos que dicen que hay un elemento del cerebro llamado el centro del placer2. Al activarlo con ciertas drogas o comportamientos, domina la parte del cerebro que gobierna nuestro juicio, fuerza de voluntad, lógica y moralidad. Eso conduce al adicto a abandonar lo que él o ella sabe que es correcto; y cuando eso sucede, quedan atrapados y Satan toma el control y hasta el mismísimo dios estaría atrapado.



Entradas que pueden interesarte

Sin comentarios