En las sombras de nuestra realidad cotidiana, hay teorías que apuntan a una inquietante posibilidad: la presencia de entidades extraterrestres hostiles que habitan cuerpos humanos con fines oscuros. Estos seres, conocidos por algunos investigadores como "parasitos energéticos interdimensionales", serían responsables de manipular la biología y la psique humana, provocando enfermedades físicas, emocionales y espirituales.
Infiltración silenciosa
Según diversas fuentes en el ámbito de la teoría alternativa y la espiritualidad esotérica, estos extraterrestres no llegan en naves ni con armamento visible. Su poder radica en la invisibilidad y la posesión. Aprovechan cuerpos humanos vulnerables, debilitados emocional o energéticamente, para introducirse y actuar desde dentro. Una vez dentro del huésped, alteran el sistema nervioso, afectan los órganos vitales e interfieren con el campo energético del ser humano, provocando enfermedades crónicas, depresiones, ansiedad o incluso trastornos mentales.
Transmisión vibracional
Lo más preocupante es la supuesta forma en que se propagan: a través de la vibración. No en el sentido tradicional del sonido, sino mediante frecuencias emocionales y mentales. Sentimientos como el miedo, la ira, el odio y la desesperanza serían canales perfectos para su expansión. En este contexto, las bajas vibraciones actúan como un terreno fértil para que estos seres se alimenten y pasen de un cuerpo a otro, como un virus emocional-energético.
La vibración como defensa
Ante esta amenaza invisible, la clave no está en la medicina convencional, sino en el cuidado del campo vibracional personal. Mantenerse en estados de alta frecuencia —como el amor, la compasión, la gratitud y la paz interior— actúa como un escudo contra estas entidades. Muchas tradiciones espirituales antiguas sostienen que el ser humano puede protegerse mediante prácticas como la meditación, el canto, la respiración consciente, el contacto con la naturaleza y la alimentación energética limpia.
¿Mito, metáfora o realidad?
Este tipo de narrativas pueden ser interpretadas desde múltiples enfoques. Para algunos, es ciencia ficción espiritual; para otros, una advertencia velada con base en experiencias personales y canalizaciones. Más allá de su literalidad, estas historias nos invitan a reflexionar sobre el estado de nuestra conciencia, la responsabilidad emocional y el poder que tiene nuestra vibración para atraer o repeler influencias externas.
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