HABRA HUMANOIDES ENTRE NOSOTROS?
De nuevo un camino sin horizonte,
humanoides camuflados con telarañas de seda,
entran y salen del submundo tenebroso de las mentes.
Un preámbulo de pasos por callejuelas,
bajo un sol que declina.
Se multiplican escenas de pánico indescriptible,
se arrancan por doquier vidas inocuas,
para ellos nada significan, solo su sustento.
Mil átomos yacen de pie contra un cielo inerte
Sintiendo paz recorriendo la sangre
del calor abrasador en la
planicie inmensa,
llega el vapor de vísceras
que aún resuellan.
Allí se mece un pájaro herido,
la niebla se alza cual amante fatuo,
ya siquiera tienen el valor de matar,
esa angustia que remueve las entrañas.