LLÁMAME POETA
Y llámame poeta
Cuando empuñe versos empapados de sangre
Cuando desfigure tu realidad en vocablos funestos
Cuando enlute la noche con mi oscuridad imperiosa
Cuando maldiga la vida y su libertad tan tediosa
Cuando escupa el veneno de los besos dados
Cuando calumnie el recuerdo de los cuerpos usados
Cuando llame a la noche invocando tú espanto
Y mi presencia funesta consuma tu llanto
Me veras fagocitar dolor a tu nombre
Me veras morir mil y una vez
Y resurgir siempre ¡siempre!
Desde el mismo infierno para así adentrarme
¡En tu corazón por mi ira ya lacerado!
Y llámame poeta
Mientras te doy el placer de bailar sobre mi tumba
Y la pálida luna refleje mi rostro en tu vientre desnudo
Cuando en tu horizonte no quede algo más que un amanecer
Y las horas desgarren tu recuerdo en silencios blasfemos
¡Tallare así con sangre y sentimientos recíprocos!
¡Tu nombre sobre mi nombre!
Y así amare eternamente lo que más odie
En mi pendenciera vida
¡Tu simple despojo!
Solo ahí, en ese instante podrás llamarme poeta
¡Eternamente!