Los consumidores de drogas han descubierto un nuevo uso para los cigarrillos electrónicos, a los que con un poco de destreza han logrado alterar para poder fumar uno de los alucinógenos más potentes.
Ciertos cigarrillos electrónicos generan la temperatura adecuada para vaporizar ladimetiltriptamina (DMT), conocida también como 'la molécula espiritual', y está causando furor entre sus consumidores, informa el portal 'Mirror'.
El DMT es uno de los alucinógenos más fuertes, pero con efectos de corta duración. Dependiendo de la dosis consumida y del medio de ingestión, los efectos de esta droga van desde leves alucinaciones hasta las experiencias más hipnóticas.
Aunque la modificación de un cigarrillo electrónico para fumar el DMT es relativamente simple, un error en el proceso de elaboración puede resultar peligroso. Varias personas afirman haber sentido fuertes dolores y una sensación de ardor en sus pulmones al inhalar el vapor caliente procedente de este proceso.
El DMT se deriva de un compuesto químico que se encuentra en muchas plantas y que son utilizadas por algunas culturas como parte de rituales religiosos. Mientras que los cigarrillos electrónicos se han convertido en una herramienta ideal para el consumo de una amplia gama de narcóticos, advierten los expertos.