En noviembre de 2012, las autoridades paquistaníes anunciaron sus planes para el registro biométrico obligatorio para todos los dispositivos móviles. Ahora, después de un largo retraso, la política se está aplicando en los 136 millones suscriptores móviles en Pakistán.
En lo que parece ser la reunión más arrebatada de verificación biométrica en la historia, millones de paquistaníes están formando líneas masivas fuera de los puntos de venta del proveedor de móviles a la espera de registrar sus huellas dactilares con su tarjeta SIM.
Funcionarios paquistaníes afirman que es sólo una medida para luchar contra el creciente terrorismo que están enfrentando desde el extremismo islamista que es persistente por muchas razones en Pakistán. La iniciativa es particularmente oportuna con la memoria reciente de el ataque llevado a cabo en una escuela por presuntos militantes islámicos que dejaron 150 muertos .
Ammar Jaffri, Presidente de la Asociación Pakistaní de la Información (PISA), ha señalado que los teléfonos celulares se utilizan para detonar bombas y extorsionar a la gente anónimamente y con el elevado número de tarjetas SIM no verificadas (alrededor de 103 millones a principios de año), la identificación de sospechosos se hace más difícil.
Así que, esencialmente, el gobierno paquistaní planea luchar contra el terrorismo y traer la paz, garantizando que cada tarjeta SIM activa en Pakistán tiene una identidad verificada detrás de él. A partir de su último informe , alrededor de 53 millones de los 103 millones de tarjetas SIM sin verificar han sido registrados.
Sin duda, el gobierno paquistaní no puede creer honestamente que esto va a funcionar como si los teléfonos celulares robados, radios y diversas formas de detonar una bomba no fueran una realidad para el militante particularmente motivado.
También se debe considerar que el servicio móvil de Pakistán por lo general no cubre la frontera entre Pakistán y Afganistán, que da la casualidad de ser un refugio popular para los extremistas. Los residentes de esa área dependen de redes afganas para el servicio móvil, haciendo esta iniciativa no solo impráctica sino muy sospechosa. De hecho, el Sr. Jaffri dijo esto:
“Tenemos una nueva tecnología ahora, y no debemos tener miedo de estas cosas, debemos enfrentarlo […] Observar los movimientos de la gente, es natural. Cada país lo hace. “
Además, Jaffri cree que los paquistaníes tienen que aceptar que cuando compras un teléfono, la tarjeta SIM “se convierte en parte de ti” y la privacidad no invalida al gobierno a controlar las ondas (telefónicas).
Todos los paquistaníes con dispositivos móviles tienen hasta el 12 de abril para registrar sus huellas dactilares con su tarjeta SIM o perder el servicio móvil; Excepto, por supuesto, para los militantes en la frontera utilizando el servicio afgano.
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