Siete rebeldes sirios, entrenados por Occidente para luchar contra el grupo terrorista Estado Islámico (EI), fueron secuestrados anoche por una facción islámica en el norte de Siria, informó hoy el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
Los rehenes son el líder de la llamada División 30, que pertenece al moderado Ejército Libre Sirio (ELS), y otros seis combatientes.
El grupo fue secuestrado cuando regresaba a sus posiciones tras participar en una reunión en la localidad siria de Azaz, en el norte de Alepo y cerca de la frontera con Turquía, en la que se analizó la posible coordinación entre dirigentes de otras brigadas insurgentes y la División 30 en la lucha contra el EI.
En un comunicado publicado en su página de Facebook, la División 30 deploró el secuestro de su líder, el coronel Nadim Hasan, y sus acompañantes en el norte de Alepo.
La organización acusó al Frente al Nusra, filial siria de Al Qaeda, de estar detrás del secuestro.
Sin embargo, fuentes del Frente al Nusra negaron cualquier relación con esta acción, según el Observatorio.
El primer ministro turco, Ahmedt Davutoglu, anunció esta semana que su país había decidido crear una “zona de seguridad” en el noroeste de Siria, libre de combatientes del Estado Islámico.
Esa área se extendería a lo largo de la frontera turca por el norte de Alepo, entre las ciudades de Azaz y Yarabulus, y se establecería en estrecha cooperación con Estados Unidos.
Fuentes del Gobierno turco han afirmado que no van a enviar tropas sobre el terreno, sino que el objetivo es sustituir la presencia del EI con miembros de la oposición moderada siria, que Turquía respalda.
El pasado mes de mayo, el secretario de Defensa de EEUU, Ashton Carter, reveló que su país había comenzado a entrenar a rebeldes sirios moderados para combatir al Estado Islámico.