En medio de esta crisis, el Consejo Galáctico emitió una orden que causó un gran revuelo en todo el mundo. Según la orden, se debía exterminar a los llamados "despiertos", aquellos que habían desarrollado habilidades sobrenaturales como resultado de la exposición a la radiación galáctica. El Consejo argumentó que estos individuos podrían ser una amenaza para la estabilidad del universo, y que su eliminación era necesaria para proteger a la galaxia de futuros peligros.
Esta orden generó una gran controversia entre la población mundial. Muchos se opusieron a ella, argumentando que era inhumana y contraria a los derechos humanos. Otros la defendieron, afirmando que la eliminación de los despiertos era necesaria para proteger a la humanidad de futuras amenazas.
En medio de esta controversia, comenzó una cacería sin tregua contra los despiertos. Muchos de ellos se escondieron o intentaron huir del planeta, pero fueron perseguidos y eliminados sin piedad por las fuerzas del Consejo Galáctico. La escena era caótica y triste, con familias enteras siendo separadas y masacradas, y aquellos que habían sobrevivido a la catástrofe climática, ahora enfrentando una amenaza aún mayor.
A medida que pasaron los meses, la situación se volvió cada vez más tensa. La población mundial estaba dividida y las tensiones entre los que apoyaban la orden del Consejo Galáctico y los que se oponían a ella aumentaron. En medio de todo esto, algunos comenzaron a cuestionar las verdaderas intenciones del Consejo Galáctico, y si su objetivo era realmente proteger al universo o controlar a la humanidad.
De Satanael