El Concepto de los Independientes
Los independientes son individuos que deciden incursionar en la arena política sin afiliarse a un partido tradicional. Su objetivo es ofrecer una alternativa fresca y distinta al sistema establecido, promoviendo la transparencia, la eficiencia y la verdadera representación de los intereses de la ciudadanía. En teoría, los independientes buscan romper con las estructuras de poder existentes y generar cambios significativos en la forma en que se hace política.
La Alianza con el Sistema del Estado Estatal
Sin embargo, lo paradójico se presenta cuando algunos de estos independientes, una vez obtenido un cargo político, deciden establecer alianzas con el sistema del estado estatal que en su momento criticaron. Esta situación puede explicarse por varias razones. En primer lugar, el proceso de gobernar requiere construir coaliciones y obtener apoyo para llevar a cabo las propuestas y proyectos planteados durante la campaña electoral. Esto puede llevar a los independientes a negociar y ceder en ciertos aspectos para lograr sus objetivos.
La realidad política también juega un papel importante en esta paradoja. Cuando los independientes ingresan al sistema, se enfrentan a una serie de regulaciones, procedimientos y estructuras de poder establecidas. Para poder implementar sus ideas y efectuar cambios, es posible que deban adaptarse al sistema existente y trabajar en colaboración con actores políticos más tradicionales. Esta adaptación puede generar tensiones entre los principios iniciales de los independientes y las realidades prácticas del ejercicio del poder.
Los Estatales que Renunciaron y se Convirtieron en Independientes
Por otro lado, también encontramos casos de políticos que fueron parte del sistema estatal, ya sea como miembros de un partido político o como funcionarios gubernamentales, y que en determinado momento deciden renunciar a su afiliación o cargo para convertirse en independientes. Esta decisión puede ser motivada por diversas razones, como la insatisfacción con la corrupción, discrepancias ideológicas o el deseo de tener mayor autonomía en la toma de decisiones.
La paradoja reside en el hecho de que estos individuos, que alguna vez formaron parte del sistema que ahora critican, buscan presentarse como opciones más confiables y honestas que los políticos tradicionales. Su experiencia previa en el sistema estatal puede ser considerada como un activo, ya que conocen de cerca su funcionamiento y las deficiencias que desean corregir. No obstante, esta transición puede generar desconfianza en algunos sectores de la ciudadania.