"En un tiempo de sombras y incertidumbres, cuando el Vaticano se vea rodeado de intrigas y sus cimientos tiemblen bajo el peso de secretos no revelados, el Papa León XIV ascenderá al trono de San Pedro. Su rostro será el reflejo de un mundo dividido, y su liderazgo, la última esperanza de unidad. Sin embargo, la gloria de su reinado será efímera.
Las antiguas escrituras hablan de un papa con el alma atormentada, elegido por las fuerzas del destino para afrontar lo inimaginable. El Papa León XIV, el último de su linaje, será llamado a enfrentar la traición de aquellos que juraron lealtad ante Dios. No será un enemigo extranjero quien lo derrote, sino las manos de quienes lo rodean, aquellos que son su propia familia espiritual.
La sangre del Papa se derramará en un acto de violencia en las profundidades de Roma, donde sus asesinos quedarán grabados en la historia no por sus nombres, sino por su cercanía al poder sagrado. Cuando el león caiga, la cristiandad se dividirá aún más, y los fieles se dispersarán, buscando respuestas en las ruinas del liderazgo perdido.
Su muerte marcará el comienzo de una era de desolación, pero no será el fin. En su lugar, un nuevo líder surgirá, aunque será uno marcado por la duda, la oscuridad y la necesidad de sanar una iglesia herida. La profecía dirá: ‘Cuando el león caiga, el rebaño será probado, y aquellos que sigan la senda de la verdad encontrarán la luz a través de la oscuridad’. Pero el camino será largo, y muchos perderán su fe antes de llegar a la paz."
"Cuando el león retorne a la cátedra de Pedro,
coronado bajo un cielo de hierro y fuego,
caerá por manos cercanas, no enemigas.
Su sangre manchará la túnica blanca,
y de su muerte brotará la división entre los justos.
Será el último en hablar con la voz del Cordero."